Artigos

Planificación y la Batalla de Winterfell

Sin categorizar 03/12/2025
Planificación y la Batalla de Winterfell

¿Qué harías si tuvieras que ganar una batalla, similar a las que se muestran en las películas de la Edad Media?

Probablemente utilizarías todas las herramientas tecnológicas para estudiar a tu oponente, inteligencia artificial para aprender las mejores tácticas de guerra en poco tiempo, usarías las redes sociales para reclutar a los mejores combatientes y muchas otras opciones.

Sin embargo, ninguna de estas alternativas sería suficiente si no contaras con una buena planificación estratégica. Prueba de ello fue la Batalla de Winterfell, o la Batalla de Invernalia, presentada en la octava temporada de Game of Thrones, que casi se perdió por errores simples que podrían haberse evitado con una planificación estratégica bien estructurada.

Pero si no sabes de qué estamos hablando, sigue leyendo este artículo, donde te daremos el contexto necesario y destacaremos los principales aprendizajes que esta batalla dejó para gestores y emprendedores, incluso si ya no viven en la Edad Media.

Contextualizando la Batalla de Winterfell

Game of Thrones es una serie estadounidense emitida entre 2011 y 2019, adaptada de los libros Canción de Hielo y Fuego, creada por David Benioff y D.B. Weiss.

La serie acompaña la lucha por el poder entre familias nobles en los continentes de Westeros y Essos, con enfoque en la disputa por el Trono de Hierro. Uno de los acontecimientos más impactantes fue la Batalla de Winterfell, también conocida como la batalla final contra el Ejército de los Muertos y el Rey de la Noche, quienes amenazaban la existencia de la humanidad.

El Rey de la Noche ya venía aterrorizando a los reinos desde hacía tiempo, pues cada persona asesinada por su ejército pasaba a formar parte de él inmediatamente, garantizando recursos ilimitados y acercándolo cada vez más a su objetivo de gobernar y destruir el mundo.

Lecciones de gestión y planificación

En este momento, probablemente te estés preguntando qué puede enseñarte una batalla basada en fantasía sobre planificación estratégica aplicable a la vida real. Descúbrelo a continuación:

– Primera lección: gestión de riesgos

La primera lección ya señala fallas en la planificación y, principalmente, en la gestión de riesgos. Al fin y al cabo, la amenaza del ejército de los muertos existía desde hacía muchos años, mientras que la preparación para la batalla final comenzó apenas unos meses antes de que ocurriera.

Conocer los riesgos que pueden amenazar la existencia de tu empresa y no trazar planes o acciones de respuesta para el caso de que se materialicen puede llevar a tu organización al fracaso en poco tiempo.

Un plan de continuidad de negocio, por ejemplo, contribuye a una respuesta rápida y reduce los impactos en la operación. En la serie, existía un monitoreo del riesgo a través de la Guardia de la Noche, pero ¿cuál era el plan en caso de una invasión del ejército del invierno?

– Segunda lección: ten objetivos claros

El principal objetivo de la batalla era acabar con el ejército de los muertos, y eso solo sería posible matando al Rey de la Noche, ya que él controlaba y mantenía a los demás soldados.

Los objetivos de las empresas, por su parte, deben ser claros y bien estructurados; de lo contrario, las etapas siguientes presentarán fallas y las acciones no serán asertivas.

Considera crear objetivos SMART:

  • Específico – debe ser claro y directo, respondiendo a las preguntas “¿Qué?”, “¿Por qué?”, “¿Quién?”, “¿Dónde?” y “¿Cuál?”
  • Medible – permite cuantificar el progreso y los resultados, evaluando de manera práctica qué tan cerca estamos de alcanzarlos.
  • Alcanzable – debe ser un objetivo realista y posible de lograr, considerando los recursos disponibles, el tiempo y la capacidad de los equipos.
  • Relevante – debe tener importancia para la empresa y los equipos involucrados, además de estar alineado con las metas macro de la organización.
  • Temporal – debe tener un plazo claro, creando sentido de urgencia y permitiendo una planificación adecuada.

Considerando estos aspectos, el objetivo de la Batalla de Winterfell y sus planes de acción demostraban falta de madurez en la planificación.

El foco estaba en matar al Rey de la Noche: el plan era usar al Cuervo de Tres Ojos como señuelo para atraerlo. Sin embargo, no quedaba claro quién eliminaría al objetivo principal ni cómo ocurriría, tanto que el plan solo tuvo éxito gracias a Arya Stark y su acción inesperada.

Por eso, antes de actuar, planea con cautela, evalúa los posibles escenarios y propone acciones de contención para cada uno.

– Tercera lección: utiliza los recursos de manera estratégica

Uno de los puntos más criticados por estrategas en la época fue el posicionamiento de los dothrakis (guerreros y jinetes nómadas) en la primera línea, sin un plan de contingencia en caso de fallas.

Los dothrakis, en el contexto de la serie, eran considerados una de las fuerzas más temidas de Westeros por su potencia física y su amplio conocimiento en combates en campo abierto. Sin embargo, solo consideraron sus puntos fuertes y olvidaron evaluar sus debilidades ante el contexto específico de la batalla.

La intención de esta ubicación era retrasar y reducir al ejército enemigo, pero debido a la falta de tácticas militares organizadas y a la ausencia de armaduras adecuadas, fueron aniquilados rápidamente.

Lo mismo puede ocurrir cuando una empresa desperdicia sus recursos más valiosos—humanos o financieros—en una sola apuesta de alto riesgo sin un análisis y planificación previa.

Recuerda que tu equipo necesita resistir después de las batallas; de lo contrario, tu empresa también llegará a su fin, incluso si has logrado una victoria inicial.

– Cuarta lección: conoce tu negocio en profundidad

Un buen plan solo es posible cuando conocemos profundamente el negocio, mapeamos fortalezas y debilidades, identificamos oportunidades y riesgos, y usamos estos aspectos a favor de la organización.

Eso fue lo que hizo el Rey de la Noche al atacar en la oscuridad, un ambiente al que ya estaba acostumbrado, convirtiéndolo en un punto de ventaja frente a su oponente, vulnerable al frío y a la falta de visibilidad.

En el mundo real, esto se asemeja a empresas que apuestan por sus puntos fuertes, o por posicionamientos por los que ya son reconocidas, para lanzar nuevos productos o servicios y ganar una ventaja competitiva.

Las oportunidades solo pueden ser percibidas y aprovechadas cuando los gestores conocen profundamente su negocio y lo entienden, logrando adaptarse a los cambios y exigencias del mercado en el que están insertos.

No subestimes el poder de la Planificación Estratégica

A pesar de las fallas e incluso de la falta de una planificación estratégica sólida, la Batalla de Winterfell fue ganada y el Rey de la Noche derrotado.

Sin embargo, las pérdidas fueron innumerables, desde recursos financieros hasta vidas que podrían haber sido salvadas. Y, si analizamos bien, la victoria ocurrió gracias a la visión estratégica y la astucia de Arya Stark, quien, al observar la situación desde otra perspectiva, identificó los riesgos y actuó rápidamente.

En la vida real de las empresas, no podemos confiar en que una Arya vendrá a rescatarnos en momentos delicados de nuestros negocios. Además, depender de que una sola persona tenga esa visión estratégica es extremadamente arriesgado, independientemente del tamaño de la empresa o del tiempo que tenga en el mercado.

La planificación estratégica debe ser incentivada por la alta dirección, sí, pero su ejecución en el día a día es responsabilidad de todos los miembros del equipo.

La gestión de riesgos también desempeña un papel esencial para el éxito y la continuidad del negocio, así como su monitoreo constante y la creación de planes de acción para mitigar o responder rápidamente ante incidentes o amenazas.

Contribuye, incluso, a la evaluación de escenarios y soluciones. Al fin y al cabo, con toda la tecnología y los recursos que tenemos hoy en día, ya no necesitamos depender de una única solución para enfrentar problemas o amenazas.

Y, por último, ten claro hacia dónde quieres llegar y qué vas a hacer para que eso suceda. No esperes a que llegue el invierno para actuar y planificar.

Comparte
el contenido

Suscríbete a nuestro boletín